Desarrollar la capacidad de razonamiento de los niños y niñas supone educarles para ser adultos con agilidad de pensamiento capaces de analizar y resolver diferentes problemas y situaciones de forma efectiva.
¿Qué es razonar?
El razonamiento hace referencia a la habilidad que permite resolver problemas, sacar conclusiones y aprender de manera consciente de los hechos mediante el establecimiento de conexiones causales y lógicas. Razonar nos permite comprender la relación entre los diferentes elementos de las situaciones, proporcionándonos la capacidad de dar una rápida respuesta.
¿Por qué es importante enseñar a razonar a los niños y niñas?
El razonamiento se constituye como una valiosa herramienta con múltiples beneficios para las personas. La habilidad de razonar va a contribuir a su bienestar y a la consecución de sus metas.
- Permite analizar situaciones y problemas, teniendo en cuenta todos los elementos implicados y la interrelación entre los mismos.
- Favorece el lenguaje.
- Potencia el desarrollo cognitivo.
- Favorece la gestión emocional (ya que pueden analizar las situaciones).
- Les dota de la capacidad para dar una respuesta rápida.
- Posibilita la resolución de problemas.
- Beneficia las funciones mentales y habilidades cognitivas.
- Les permite planificarse.
¿Cómo se construye el razonamiento en el niño/a?
El desarrollo del razonamiento comienza desde el nacimiento, la clave es apoyar y potenciar el ritmo de maduración neurobiológico del pequeño.
Las distintas capacidades lógicas se van adquiriendo poco a poco siguiendo un camino secuencial. Se comienza por capacidades lógicas sencillas como clasificación, similitudes, relación, etc… estimulando al pequeño en estas actividades estamos contribuyendo a su desarrollo neurobiológico y aumentando las conexiones neuronales de su cerebro. Para avanzar en la complejidad de las habilidades se hace necesaria la adquisición y acomodación de las previas. Cuando estas primeras habilidades se dominan poco a poco se sigue un camino de capacidades hasta llegar a las de orden superior como la abstracción.
El desarrollo del razonamiento requiere por lo tanto un entrenamiento en capacidades mentales, secuencial y poco, donde el niño/a tenga un papel activo.
10 Pautas para favorecer el desarrollo de las habilidades de pensamiento.
- Permite a los pequeños que experimenten y exploren desde un primer momento y no coartes nunca su iniciativa.
- No fuerces al niño/a, deja que siga su propio ritmo, pero proporcionales actividades y tareas que puedan estimular su razonamiento.
- Muéstrale los diferentes elementos lógicos de las experiencias y las relaciones entre los mismos. Pídele que busque los elementos y que indague las relaciones.
- En los primeros años, fomenta actividades de clasificación, seriación, búsqueda de similitudes, etc.
- Responde a sus preguntas y explícale sus interrogantes.
- Insiste para que verbalice sus razonamientos. Verbalizar (de forma oral o escrita), permite un mayor nivel de comprensión y posibilita la acomodación y asimilación de la lógica encontrada.
- Ayúdale a razonar haciéndole preguntas. Pregúntale por qué (¿Por qué has clasificado esto así).
- Emplea juegos y dilemas de lógica, que le permitan entrenar su pensamiento.
- Enséñale a analizar los datos antes de resolver un problema o dar una respuesta (en un principio esto hará que sus respuestas se demoren, pero poco a poco contribuirá a la agilidad de pensamiento.)
- Presta atención a su edad, etapa de desarrollo y características individuales. Cada niño/a es distinto, si no atendemos a esto, podemos sobre estimular o dar una escasa estimulación.
Celia Rodríguez Ruiz
Psicóloga y Pedagoga
FUENTE: EDUCAYAPRENDE
No hay comentarios.:
Publicar un comentario